El luthier berciano Maikel Barreira y sus curiosos instrumentos 100% ecológicos
Cuando hablamos de tranquilidad, trabajo ecológico y una vida sostenible, casi siempre nos viene a la mente el campo o la montaña. Pero tenemos que tener en cuenta que más que la importancia del lugar, debemos tener presente la importancia del individuo y sus metas sostenibles.
El Etnomusicólogo y Luthier Maikel Barreira nos cuenta como ha sido esta década dedicada al auto cultivo ecológico de Calabazas para la elaboración de instrumentos musicales.
Natural de Fabero, un pueblo industrial dedicado a la minería donde la tierra tiene un color más oscuro y compuestos minerales mucho más pesados y que asegura Maikel es muy eficaz para determinados cultivos de cucurbitáceas.
El artista berciano tiene una filosofía basada en la simplicidad "Lo más importante es trabajar la tierra, intentar abonarla con tus propios animales, y por supuesto no utilizar en el cultivo nada más que agua, cultivo ecológico"
La experimentación es parte importante de su trabajo "En España tenemos muchos tipos de Calabazas, pero realmente utilizo calabazas de todas las partes del planeta, incluyendo una de las más escasas y extrañas del mundo como es la Semilla del Hombre de las Cavernas o Huevo de Dinosaurio. La Thrichosantes Cucumerina, una de las cucurbitáceas más grandes que existen llegando a tener una longitud de 2,5 metros y un largo etcétera de diversas especies y experimentos"
Un trabajo de tesón y constancia en el que hay que esperar para ver los resultados: "Desde la semilla a conseguir ejecutar el instrumento podemos tardar de 1 a 5 años, dependiendo del curado y por supuesto del instrumento"
Desde el Bierzo para el mundo: Ecuador, Francia, Australia, Portugal, Francia...Son algunos de los países donde podemos encontrar tanto instrumentos como calabazas del músico.
Una apuesta por la sostenibilidad que se va convirtiendo en un modo de vida: "En un año tan extraño y diferente como este, uno se da cuenta que lo más importante es intentar depender lo menos posible de nada, intentar ser auto sostenible dentro de las posibilidades"
"Durante la cuarentena he podido construir una pequeña choza completamente en barro y materiales reciclados, la cual me ha llevado un tiempo aproximado de dos meses. Cuando duermes y pasas días y noches en un lugar construido por ti mismo, sin luz, ni agua, ni comodidades… realmente te das cuenta que no necesitas mucho más…Trabajar con y para la tierra, este es nuestro futuro y el de nuestro planeta"
Iniciativas ecológicas y diferenciadoras con valor añadido para nuestros pueblos y comarcas. Gracias Maikel.