Mi sentimiento de persona agradecida y de admiración por el trato recibido en el Hospital de León
La Unidad de ICTUS de la Sección de Neurología ubicada en la sexta planta del Hospital Virgen Blanca, recibió en la reunión de la European Stroke Organization celebrada en Goteborg (Suecia) los días 16 a 18 de mayo, la distinción ESO Angels Awards Gold Status, distinción que acredita aquellos centros que reúnen unos criterios de Excelencia en la atención del Ictus agudo.
Dice el Dr. Javier Tejada García, Coordinador del área, que la importancia de los primeros 90 minutos en el pronóstico del paciente es la diferencia entre la vida y la muerte, o en tener una discapacidad permanente.
En más de una ocasión podemos escuchar en nuestro entorno quejas sobre el Servicio de Salud, el Sistema Público en España. ¿Pude haberlo hecho en alguna ocasión? No creo, no lo recuerdo, pero si así fuese sería por alguna nimiedad como puede ser la provisión de algún medicamento. Tal vez haya que enfermarse de verdad alguna vez para poder comprobar la eficiencia del Servicio.
Todo comenzó la tarde de un sábado que acudí a Urgencias por unos síntomas de Ictus: quedé maravillado por los estudios que me realizaron en el término de 3 o 4 horas: anamnesis y exploración clínica, analítica, electrocardiograma, radiografía de tórax, “TAC” cerebral y análisis del conjunto de pruebas para arribar al diagnóstico presuntivo: obstrucción “momentánea” en la irrigación. A falta de una prueba para la que me dieron cita, para realizar un “eco döpler” unos días después.
Llegué a la 6ª Planta donde se encuentra la “Unidad de Ictus” y pregunté en mesa de entrada; con suma amabilidad me indicaron si quería tomar asiento, que me avisarían cuando llegara el médico (yo había asistido mucho antes de la hora indicada).
La amabilidad se prolongó con la atención del Doctor Javier Tejada que me hizo pasar a su despacho para la prueba pertinente; finalizada la misma me indicó la necesidad de internarme unos días y pese a mi incomodidad pues tenía un programa a realizar durante dos días en León junto a mi esposa antes de regresar a Veguellina de Órbigo, insistió en que era imprescindible porque debían hacerme otra prueba para “afinar más la puntería”, un TAC de contraste; razonamiento que acepté.
Como coincidió con el Puente de la Constitución, la estadía en el “Hotel” se prolongó varios días que podían generar irritación por lo menos; de ninguna manera, la atención de todo (¡Todo!) el personal fue impecable, altruista y hasta se percibía dulzura en el trato… no hacia mi persona ya que era uno más, sino al conjunto de los pacientes: personal administrativo, de limpieza, de enfermería (y sus estudiantes con los que me permití alguna broma sin que percibiera malestar), personal médico de cabecera que en mi caso particular era el doctor Javier Tejada, con ese sentido humanitario que deben tener y en general tienen los que se abocan a la Sanidad Pública.
Mis felicitaciones y agradecimiento a todo el conjunto hospitalario (ya que alguna prueba requirió el traslado a otro sector) y en especial la 6ª Planta cuya UNIDAD DE ICTUS coordina maravillosamente el Dr. Javier Tejada García a quien transmito no solo mi sentimiento de persona agradecida sino también el de admiración por su dedicación.
César Tamborini