CHISTES PARA EL CAFÉ

El otro día pedí en un bar un Gin Tonic,

el camarero le estuvo echando cosas durante

un rato y le salieron unas lentejas riquísimas.


– ¡Y el tío me llamó inculto!

– No, ¿en serio?

– Y lo que es peor, también me llamó:

¡Xenófobo! ¡Xenófobo a mí! ¿Te lo puedes

creer? ¡Con lo que me gustan las tetas!


- ¿Me podría decir su número de DNI sin

la última letra, por favor?

- Claro, eso está chupado. Anota: Siet,

cinc, nuev, och...


- Hola, ¿son aquí los exámenes de jardinería?

- No, se ha equivocado de planta.

- Pues sí que empezamos bien...


Un Senegalés, que quiere venir a España

y compra por 1000 € un pasaporte falso

con una foto de Leonardo di Caprio.

El caso que llega a la frontera y hay una

fila para pasar uno por uno delante del

guardia civil. Cuando el tipo llega al

guardia civil, le enseña el pasaporte to

asustado. El guardia civil mira la foto se

queda extrañado y le dice al hombre.

- ¡Espérese un momento!

Entra dentro de la caseta y le dice al teniente.

- ¡Mi Teniente! Usted que es un hombre

de mundo y tiene estudios… El Titanic

¿Se hundió o se quemó?


-Hola Manolo cuanto tiempo sin verte,

¿cómo te va la vida?

- Bien, ahora soy experto en jeroglífi cos.

- Anda que suerte, pues échale un vistazo

al mío, que no enfría bien y con este

calorón.


En un vagón de un tren viajaban un

abuelo y un joven punk. El viejo no podía

quitar el ojo del pelo decorado del

chaval, multicolor, la mayor parte verde,

un tupé amarillo y la melena a rayas de

colores que parecía un arco iris. En esto,

el chaval se mosquea de las miradas del

viejo y le dice:

- ¿Pero qué paaassa, abuelo? Deje usted

de mirar tanto, ¿me va a decir que de joven

nunca hizo nada raro?

- ¡Claro que si, hijo!, responde el abuelo.

Una vez me lo hice con un papagayo

y estoy pensando si tú no serás mi hijo.


-¡Qué bonito pelo!

-Gracias, es natural

-¿Qué laza es? ¿Muelde?