Hostelería de León: Se está persiguiendo a un sector que pasa por su peor momento.
La falta de diálogo con el sector y falta de coordinación y planificación vuelve a marcar la actuación del Gobierno. La persecución a la que se está sometiendo a la hostelería pone en peligro entre 900.000 y 1,1 millones de puestos de trabajo, entre directos e indirectos.
Es de vital importancia para garantizar los empleos de los trabajadores de la hostelería, que el Gobierno acompañe las restricciones de medidas compensatorias.
Hostelería de León considera que el sector no puede asumir más medidas restrictivas sin ningún tipo de apoyo.
Ante las medidas anunciadas en el día de ayer por el ministro de Sanidad, Salvador Illa, que afectan especialmente a la hostelería:
La prohibición de fumar en la vía pública o al aire libre, tanto cigarrillos como el vapeo, si no se pueden mantener dos metros de distancia de seguridad
El cierre de todo el ocio nocturno: discotecas, salas de baile y bares de copas, con y sin actuaciones en directo.
La hostelería, los restaurantes, las terrazas y bares y chiringuitos de playa tendrá que haber un metro y medio de distancia entre mesas, con 10 personas como máximo por grupo. Esta distancia también se tendrá que respetar en las barras. La mesa o agrupación de mesas que se utilicen para los grupos con un máximo de diez personas deben respetar también la distancia mínima interpersonal.
Todos estos establecimientos tendrán su hora de cierre a la 1 de la madrugada y no podrán admitir a nuevos clientes desde las 12 de la noche.
Desde Hostelería de León consideran que no se puede responsabilizar a un sector y centrar todas las a
ctuaciones sobre el mismo, sin contemplar en ningún momento medidas compensatorias.
Los datos revelan que entre los meses de abril y junio estuvieron empleados en el sector 400.000 trabajadores menos que en los mismos meses del año anterior, 1,4 millones frente a 1,8 millones, según los datos de la EPA. De ellos, además, más de 900 mil estaban acogidos a un ERTE por fuerza mayor en abril, cerca de esa cifra en mayo, y todavía en junio se mantenían casi un 40% (557.254). Además, a 31 de julio todavía se mantenían un 20% de ellos en ERTE, cerca de 342 mil trabajadores
La hostelería supone el 6,2% del PIB, y da empleo a 1,7 millones de personas. La caída que sufre la hostelería supone que a día de hoy un 20% de los negocios hosteleros no hayan podido abrir todavía, y se estima que de aquí a final de año unos 65.000 establecimientos hosteleros cierren definitivamente, suponiendo una pérdida de empleos, entre directos e indirectos, de entre 900.000 y 1,1 millones.
La hostelería supone el 6,2% del PIB, y da empleo a 1,7 millones de personas.
Situación que puede empeorar si siguen regulando en la línea de lo anunciado, sin contar con el sector y sin ofrecer soluciones de apoyo a la demanda y que garanticen la viabilidad de los negocios.
La asociación leonesa considera que ante los alarmantes rebrotes debe actuarse con contundencia, y la seguridad de todos debe primar en las decisiones, pero incide de nuevo, en la sensación de improvisación y falta de coordinación y claridad por parte del Gobierno, lo que impide a los empresarios poder establecer un plan de actuación y una correcta organización, con el consiguiente impacto adicional en su actividad.
Desde el sector se reclama, una vez más, al Gobierno trabajo conjunto en la búsqueda de soluciones para que éstas no supongan el hundimiento definitivo del sector. Esta precipitación supone un grave perjuicio económico y empaña la imagen de un país en el que el turismo supone el 12,3 % del PIB (datos INE).
Martín Méndez, presidente de Hostelería de León y José Luis Yzuel, presidente de Hostelería de España declaran : “es increíble que se esté demonizando a un sector que, en su gran mayoría, se ha comportado de manera ejemplar, y desde el primer momento ha asumido medidas mucho más rigurosas de las que se han impuesto a otros actividades. Atacar a los negocios hosteleros no es la solución a un problema que debe pasar por la responsabilidad y cumplimiento de la normativa por parte de todos, así como por un plan de prevención por parte de las Administraciones”.
Asimismo reclaman mayor rigurosidad “no hay evidencias científicas que avalen las decisiones adoptadas” El sector no puede seguir asumiendo acciones restrictivas de su actividad sin medidas de carácter compensatorio, tanto sobre las empresas como el empleo.
En estos momentos, la limitación de recursos no puede ser excusa puesto que las comunidades autónomas disponen de fondos de aplicación al refuerzo del sistema y las medidas sanitarias. Se están aplicando medidas cuyo contexto es 100% sanitario y, por ello, tanto desde el gobierno central como desde comunidades autónomas se debería contemplar, cada vez que se produzcan medidas restrictivas a la actividad económica, destinar parte de esos fondos a complementos de recursos que preserven el empleo.