La FELE informa que marzo deja en León un descenso de 851 parados
Los últimos datos del paro correspondientes al mes de marzo reflejan en León un descenso de 851 personas (-3,5%) en las listas de desempleo respecto al mes anterior y 2.528 personas (9,63%) en términos interanuales. León se sitúa así con 23.724 desempleados de los cuales casi el 60% son mujeres (14.048)
Por sectores, es el sector servicios –esencialmente por el peso de Semana Santa en la hostelería- el que lidera de nuevo la creación de empleo en la provincia, registrando 667 personas que han encontrado empleo en este sector seguido por construcción (-82), Industria (-69) y Agricultura (-39), registran un descenso en el número de parados.
En lo que respecta a afiliación, León incrementa en 1.112 el número de afiliados respecto el mes anterior, situándose en 162.563.
Con estos datos, la Federación Leonesa de Empresarios (FELE) insiste en atacar la hiperregulación que actualmente lastra la actividad de las empresas y señala que para la generación de empleo estable y continuo realiza un llamamiento para que las distintas administraciones apuesten de forma clara tanto por la simplificación administrativa, como por la reducción de cotizaciones e impuestos, todo ello con el fin de no mermar las expectativas de incremento de actividad.
Igualmente, si bien los datos del último mes son positivos, están claramente influenciados por la Semana Santa, por lo que de cara a la estabilidad de esta tendencia se hace preciso reducir los costes sociales y el gasto público, pues en este contexto, resulta inconcebible la actual reforma del sistema público de las pensiones en España, que resta competitividad a las empresas debido a la subida generalizada de cotizaciones. Esto conlleva a una merma de la capacidad adquisitiva de los trabajadores y un incremento de los costes laborales, poniendo en peligro la consolidación de los puestos de trabajo. Una reforma que, además, se ha llevado a cabo sin el necesario debate y diálogo social, como valor fundamental de desarrollo de políticas activas de empleo.
Finalmente, junto con la reducción de las cargas administrativas, las políticas activas de empleo en nuestra Comunidad deben esforzarse a través del dialogo social por priorizar medidas que favorezcan la incorporación de la mujer al mercado laboral pues es un colectivo que continúa presentando especiales dificultades de inserción especialmente en las zonas rurales.