La nueva Ordenanza de Limpieza y Residuos entra en vigor con novedades importantes
Este viernes ha entrado en vigor la nueva Ordenanza Reguladora de la Limpieza y Residuos. Esta fue aprobada definitivamente en pleno a finales del mes de mayo con la unanimidad del Pleno Municipal y, finalmente, este viernes ya ha entrado en vigor. La pretensión de estas nuevas disposiciones municipales es preservar el entorno urbano y mejorar la calidad de vida en la ciudad.
La ordenanza pretende conseguir que, por parte de la ciudadanía, se dé un comportamiento adecuado, pero también trata de sensibilizar a todos en relación con los retos que suponen realizar una adecuada gestión de los residuos que generamos. Durante las próximas semanas, el Ayuntamiento de León, a través de la Policía Local, llevará a cabo una campaña informativa entre la ciudadanía para llevar a cabo las medidas contempladas en la Ordenanza, lo que también se hará a través de campañas informativas especiales por otros medios de difusión.
Esta ordenanza tiene por objeto la regulación, en el ámbito de las competencias del Ayuntamiento de León, de todas aquellas conductas y actividades dirigidas a la limpieza de los espacios públicos y privados de uso público que componen su ámbito de aplicación, así como la recogida, almacenamiento, transporte y, en su caso, tratamiento, de los residuos domésticos y municipales, con el fin de conseguir las condiciones adecuadas de salubridad, bienestar ciudadano, pulcritud y ornato, en orden a la debida protección de la salud de las personas, los espacios públicos y el paisaje urbano, así como del medio ambiente, fomentando actitudes encaminadas a mantener la ciudad limpia y posibilitar la reducción, reutilización, reciclado y otras formas de valorización de los residuos.
Entre las prohibiciones que recoge la nueva Ordenanza Municipal figuran todas aquellas acciones que menoscaben la limpieza del municipio, empeoren su aspecto o vayan en detrimento de su ornato, dejando a salvo las situaciones autorizadas por el Ayuntamiento, previa la adopción de las medidas que éste determine. En concreto, queda prohibido quemar residuos, desperdicios, basuras o materiales de cualquier tipo, o arrojarlos o depositarlos en las vías públicas o privadas, en sus aceras y en los solares o fincas valladas o sin vallar, o en la red de saneamiento, debiendo utilizarse siempre los contenedores o lugares específicamente designados por el Ayuntamiento para estos fines y a las horas estipuladas para ello. Asimismo, los residuos sólidos de pequeño volumen como papeles, colillas apagadas, envoltorios y similares, deben depositarse en las papeleras existentes al efecto. Sujeto a sanción también está escupir, orinar o defecar en la vía pública, así como tampoco se puede arrojar colillas o chicles masticados en la vía pública. Tender la ropa en balcones o ventanas orientados a la vía pública también está prohibido en la ciudad de León como también lo está sacudir ropas, alfombras o similares en la vía pública. Todos estos aspectos estaban recogidos en la anterior normativa y se mantienen en esta al igual que la prohibición de consumir bebidas alcohólicas en espacios públicos, siempre que con dicha conducta se cause deterioro al entorno, se abandonen residuos o se provoquen molestias a las personas que utilizan dicho espacio público o a los vecinos.
La prohibición de recoger las heces de las mascotas en la vía pública ya estaba contemplado en la anterior Ordenanza y en la nueva se incluye, además, la obligatoriedad de limpiar los orines. Es obligatorio ahora en la ciudad de León portar las debidas bolsas y agua en cantidad suficiente para diluir la suciedad que los animales pueden generar en la vía. No hacerlo supone una infracción leve que puede oscilar entre los 50 y los 750 euros.
La Ordenanza regula, además, la limpieza y el mantenimiento de los elementos y partes exteriores de los inmuebles, la limpieza en establecimientos comerciales y de hostelería, la de solares y fincas y la de nevadas u otras inclemencias climatológicas. Asimismo, estas disposiciones marcan también la actividad municipal en materia de limpieza viaria y gestión de residuos, así como regula el funcionamiento de los puntos limpios.
Las infracciones por el incumplimiento de lo dispuesto en la normativa pueden ser leves, graves y muy graves con multas que pueden ir de los 50 euros las más leves, a los 3.000 euros las muy graves, cantidad que podría ascender a los 3,5 millones de euros en el caso de tratarse de residuos peligrosos o suelos contaminados.