Martes cinematográfico con "Fresas Salvajes" en el Cine de los Capuchinos

"Fresas Salvajes" en el Cine de los Capuchinos de León
El próximo martes, 9 de abril, a las 20:00 horas, los cinéfilos de León tendrán la oportunidad de disfrutar del cine clásico en el Cine de los Capuchinos del Teatro San Francisco.Se trata de la proyección de la película "Fresas Salvajes", un clásico del cine sueco dirigido por el renombrado cineasta Ingmar Bergman.

La trama sigue al profesor Borg, un médico destacado, quien se ve enfrentado a su propia mortalidad tras un inquietante sueño. Decidido a enfrentar sus demonios internos, emprende un viaje a la ciudad de Lund para recibir un homenaje de su universidad. Acompañado por su nuera, recién separada de su esposo debido a diferencias irreconciliables sobre el deseo de tener hijos, el profesor Borg se detiene en la casa de sus vacaciones de la infancia. Allí, entre las fresas salvajes que crecen en los alrededores, rememora su primer amor y se enfrenta a la complejidad de la vida y la muerte.

Esta obra maestra del cine sueco, aclamada por la crítica internacional, ofrece una mirada profunda y conmovedora sobre la naturaleza humana y los dilemas existenciales. No te pierdas la oportunidad de disfrutar de esta experiencia cinematográfica única en el Teatro San Francisco de León.

Entradas 4 € y estarán disponibles en la taquilla del teatro una hora antes del inicio de la película.

Teaser

Título Original: Smultronstället
Año: 1957
Duración: 90 min
País: Suecia
Dirección: Ingmar Bergman
Guión: Ingmar Bergmansas Salvajes" en el Cine de los Capuchinos de León
Música: Erik Nordgren
Fotografía: Gunnar Fischer (B&W)
Reparto: Victor Sjöström, Bibi Andersson, Ingrid Thulin, Gunnar Björnstrand.

“DOS EN LA CARRETERA”

Película dirigida en 1957 por Ingmar Bergman sobre un guion del propio director. Entre la herencia clásica, con obras como “La Odisea” de Homero, y el imaginario del cine estadounidense de posguerra, Bergman elabora una “road movie” apasionante. El viaje físico se convierte en un viaje interior y profundamente personal, donde se desarrollan todos los temas recurrentes en la filmografía de Bergman como la colisión entre la fe y la razón, la manera de enfrentarse a la muerte, la incomunicación en el matrimonio o la férrea educación católica. Como era habitual en el cineasta sueco, vuelca en la película todas las obsesiones que asediaban su existencia, un modelo que posteriormente han potenciado cineastas como Woody Allen. Dentro de estas “obsesiones”, en “Fresas salvajes” cobra especialmente relevancia el tema de la muerte, coincidiendo en el mismo año con otra  obra suya, “El séptimo sello”, donde trata el mismo tema desde otro punto de vista. En cuanto a las interpretaciones, nos encontramos con un gran Victor Sjöstrom, que dota a su personaje de una inmensa melancolía con su mirada perdida, sus gestos, sus movimientos y sus silencios. El que fue uno de los pioneros y grandes directores del cine mudo, con obras como “La carreta fantasma” (1921) o la recién proyectada en este teatro, “El viento” (1928), era un referente para Bergman y su participación en la película no deja de ser algo simbólico, pues fue su última aparición en la pantalla, uniendo así actor y personaje en uno solo. La muerte cinematográfica traspasa el celuloide y se asienta en la real. Junto al protagonista, y excepcionalmente fotografiados por Gunnar Fisher, nos encontramos con la “troupe” habitual en las películas de Bergman, formada por grandes intérpretes como Ingrid Thulin, Bibi Anderson, Gunnar Björnstrand, Max Von Sydow, o Gunnel Lindblom. Otras películas han tratado el tema de la vejez y la muerte de forma magistral como, “Muerte en Venecia” (1971), “En el estanque dorado” (1981) o la claramente inspirada en este film, “Nebraska” (2013). Personalmente, junto a “Fresas salvajes”, mis películas favoritas sobre este tema son “Umberto D” de Vittorio De Sica y “Vivir” de Akira Kurosawa. Les invitamos a disfrutar de esta joya, una “road movie” que usa una mezcla de sueños, recuerdos y flashbacks con tintes surrealistas, para ofrecernos una de sus obras maestras, una película tan imprescindible y exquisita como su propio título.

RAPAZ