24 de septiembre de 2012, 11:37
Alberto el del mesón
Alberto el del mesón
Veinte versos, solo veinte
y de Alberto hago el retrato.
Veinte versos, solamente.
Doy comienzo al primer plato:
Entremeses, luego, pato,
que es un plato delicado;
rape o lubina, pescado
que tiene un sabor divino.
Para beber, solo vino
pero, eso si, afrutado.
Y Alberto insiste: “Aconsejo
otro menú de la casa”:
perdiz de monte o conejo,
cocinado en vino añejo
y un chuletón a la brasa.
Si seguís hambrientos, mecho
un cabrito, más ,sospecho,
que ha de sobrar una fuente.
Vino. Postre y aguardiente.
Contad. ¿Son veinte?. Está hecho