O leite
O leite
El titulo de este articulo no es una reivindicación de la otra lengua tan berciana como el castellano, aunque no está de más recordarlo de vez en cuando, sino más bien un pequeño homenaje a los ganaderos de Galicia y por extensión de todo el noroeste (desgraciadamente en el Bierzo no queda ni una sola granja de vacas de leche). En un reciente viaje a la Terra Chá de Lugo y al Val de Meira y Baralla, viaje muy recomendable por sus paisajes, el Castro de Viladonga (algún día nuestro Castro Ventosa se parecerá a este...) y su gastronomía, pude contemplar como la Unión Europea ha acabado con el rural galaico. Esta era una zona totalmente ganadera, de vacas por supuesto, y hoy el panorama es desolador con montones de explotaciones abandonadas y muchas aldeas en las que no se ve ni un gato cruzar la carretera. ¿Cómo se ha llegado a esto? muy fácil: si se vende un litro de leche a 60 pts. y cuesta producirlo 70, quien es el tonto que sigue con las vacas salvo que aun le deba al banco un montón de millones.
En Galicia como en otras zonas, la Política Agraria Común Europea se cargo los pequeños productores con diversas razones: de productividad, de eficiencia, medioambientales, trazabilidad de los alimentos, de molestias ¿? en los pueblos, etc. y las grandes industrias lecheras y las grandes marcas de supermercados vieron el cielo pues al final se ha demostrado que han pasado a ser verdaderos monopolios que ponen y quitan a su gusto. Cuál es el día a día: cuando un ganadero protesta el chófer del camión le dice “no protestes mucho que te dejamos de venir a por la leche, lo que sobra es leche en Europa y más barata“, frase textual.
¿Qué bebemos los españolitos?: Pues la propia ministra del ramo a dicho que es prácticamente imposible saber de donde procede la leche que va en un brik. Es decir no podemos beber la leche de las antiguas lecherías, está prohibido por sanidad, pero las autoridades no saben que va en un litro de leche, ¡tócate o carallo!. ¿Qué podemos hacer los consumidores?: Beber leche de marcas locales que de verdad lo sean, de ganadería ecológica o resignarnos como en tantas otras cosas.
Guarden la foto de las vacas del abuelo pues sus nietos les preguntarán qué era ese bicho.
Victor M. García (Veterinario)