En una emocionante final celebrada en el recinto ferial IFEZA de Zamora, el chef Juan Carlos Jiménez Pradas, del restaurante Azul Mediterráneo de Valladolid, ha sido nombrado ganador de la primera edición del Concurso Oficial de Pinchos y Tapas de Castilla y León. Su creación, “Lechazus Deliciosus,” un original pincho de lechazo inspirado en un níscalo con tierra de piñón, guiso de costilla y crujiente de pan, ha conquistado al jurado, obteniendo el codiciado pincho de oro.
El segundo lugar ha sido para Francisco Javier Ruíz Fonta, del restaurante La Jamada de Burgos, por su pincho de plata "Fricassé con guiso thai de carrillera y mango". El bronce ha recaído en Sara Cámara Fernández, de Casa Pacheco en Salamanca, con su creación "Salmorejo, cangrejo de río y trucha del Tormes".
Además de los galardones principales, el jurado ha otorgado tres accésits especiales: la “Tapa más Tradicional” fue para "Y un cuerno!", de Adrián Asensio Malillos, del restaurante Cuzeo de Zamora; la “Tapa más Vanguardista” fue "IY.XI" de Jiale Pan, del restaurante Jiapan en Valladolid; y el “Mejor Concepto de Tapa” fue para Andrea Salazar Cornejo, de Rosa Mexicano Taquería en Segovia, con su "Taco crujiente de cochinillo segoviano".
La final contó con la presencia de figuras destacadas como el presidente de la Confederación Empresarial de Hostelería de España, José Luis Yzuel; el presidente de la Confederación de Hostelería y Turismo de Castilla y León, Jaime Fernández, y Jesús Sánchez, chef con tres estrellas Michelin, quien presidió el jurado. La competencia reunió a 27 chefs de toda Castilla y León, quienes participaron tras clasificarse en concursos provinciales.
El certamen, organizado por HOSTURCyL con el apoyo de la Junta de Castilla y León, no solo promueve la gastronomía local, sino que es una vitrina de talento culinario y del patrimonio gastronómico de la comunidad. Durante la semana, zamoranos y visitantes pueden degustar estas tapas en los restaurantes locales asociados a cada chef participante. León ha sido anunciada como la sede de la segunda edición en 2025, lo que promete una nueva muestra del arte culinario regional.