sábado. 23.11.2024

La Federación Leonesa de Empresarios (FELE) insiste y exige al Gobierno que clarifique y detalle con la máxima urgencia las medidas que prevé adoptar para poner freno a la elevación de costes energéticos y a la espiral inflacionista; así como al bloqueo de las carreteras, que está ocasionando ya desabastecimientos a la población y paralizando la actividad económica, y que, como resultado, amenaza con una gran crisis económica y social. Lo hace tras la reunión mantenida por su Junta Directiva y en línea con la posición adoptada por su patronales CEOE, Cepyme y CEOE Castilla y León.

Respecto al paquete de medidas acordado con el sector del transporte, todavía hoy se desconoce cómo se implementará y, por ello, FELE insta de forma taxativa a que mañana, en la cuarta reunión que va a tener lugar con el Ministerio con representantes del sector, se detallen de una vez, entre otras, las cuestiones relativas a las ayudas directas en céntimos/litro al combustible, en línea con otros países de la UE, para que el transporte pueda operar con normalidad. No es una cuestión aplazable por más tiempo.

Mientras esto sucede en nuestro país, los países vecinos como Francia, Italia o Portugal ya han desplegado planes anticrisis precisos, con una fecha de puesta en marcha prevista.

Es difícil de comprender que no se haya actuado con mayor contundencia y rapidez frente a los bloqueos de los suministros y en favor de aquellos que no pueden mantener su actividad por ello. Ya son mayoría los sectores empresariales de León que están en una situación insostenible. En esta situación, el clamor de las empresas, tal y como se está trasladando diariamente a FELE, amenaza con desbordarse ante la inacción política.

 Los empresarios leoneses amplían su llamada al Gobierno para que acelere y clarifique las necesarias acciones encaminadas a reconducir esta situación de nuevo hacia la recuperación y a dar confianza y seguridad para poder trabajar entre todos mirando al futuro.

FELE exige al Gobierno medidas para poner freno a la situación que asfixia a las empresas