lunes. 25.11.2024

El pasado domingo, 21 de abril, gracias al aviso de un particular, los agentes medioambientales de la comarca palentina de Cervera de Pisuerga localizaron un ejemplar de lobo ibérico, siendo trasladado posteriormente al Centro de Recuperación de Animales Silvestres de la Junta de Castilla y León en Burgos.

Durante la necropsia realizada el día siguiente, se determinó que el ejemplar era un macho de unos tres años de edad, con un peso de 36 kilogramos y en buena condición corporal. Se identificaron numerosas lesiones punzantes en la piel, especialmente en los cuartos traseros, el cuello, el abdomen, las patas y el rostro.

La exploración radiográfica descartó la presencia de restos metálicos, eliminando así la hipótesis del disparo como causa de la muerte. Se observaron hematomas subcutáneos de gran tamaño, indicativos de que el animal estaba vivo al momento de sufrir las lesiones.

Además, se encontró una costilla fracturada y sangre acumulada en los pulmones, así como una lesión en el bazo, sugiriendo una fuerte contusión en el órgano. Todas las lesiones son consistentes con mordeduras de cánidos, aunque no se puede determinar si fueron causadas por animales domésticos o silvestres.

Descartado el disparo como causa de la muerte del ejemplar de lobo recogido el domingo