Estos cursos, que iniciaron el 1 de marzo, tienen como objetivo proporcionar cualificación y competencias profesionales a través de una formación teórico-práctica, incluyendo la realización de trabajos reales para favorecer la inserción laboral.
Durante un período de doce meses, los participantes tienen la oportunidad de recibir formación y trabajar bajo la supervisión de cuatro profesores especializados en el ámbito ambiental. Además, la capacitación ofrece la posibilidad de obtener un certificado de profesionalidad reconocido a nivel nacional.
En esta edición, gestionada por el área de Medio Ambiente de la Diputación y dirigida por la diputada Lucía Osorio, se ofrecen dos proyectos formativos: uno en trabajos forestales y otro en apicultura, viveros y jardinería. Cada especialidad cuenta con un total de 1,800 horas de formación teórico-práctica.
La Diputación, además de su contribución económica, facilita las instalaciones de San Cayetano y el Monte San Isidro, así como maquinaria forestal y de jardinería, viveros de apicultura y salas de extracción y envasado de miel para la realización de prácticas.
En el ámbito de los trabajos forestales, se capacita a los participantes en actividades como la repoblación forestal, el aprovechamiento de productos forestales y la corrección hidrológico-forestal. En cuanto a viveros y apicultura, los alumnos se encargan del mantenimiento de un colmenar, control de plagas en jardines y operaciones de vivero.
La formación se imparte cumpliendo estrictamente las normativas de prevención de riesgos laborales y protección del medio ambiente, con módulos específicos en igualdad, sensibilización ambiental, orientación profesional y primeros auxilios.