El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, ha advertido hoy de que estamos en un momento clave, avanzando en la seguridad sanitaria gracias a la vacunación y en una senda de crecimiento económico. Y ha recalcado que, como jefe del Ejecutivo autonómico, tiene enfocado un 2022 de recuperación con cifras prepandemia. Así lo ha asegurado durante la clausura de la inauguración del Curso Económico de Castilla y León, organizado por la Cámara de Valladolid y la Feria de Valladolid, donde ha defendido que unas políticas económicas responsables y fiscales acertadas hacen de Castilla y León un territorio para invertir con confianza y seguridad.
“Si 2020 fue el año de la resistencia, 2021 es el año de la remontada y 2022 por supuesto será el de la recuperación”, ha subrayado Fernández Mañueco, quien ha apuntado que los datos esperanzadores alientan este objetivo. Así, ha recordado que en 2020 se cumplió el triple objetivo de acabar con menos recesión, menos paro y menor deuda que la media española. Lo que indica, ha añadido, que Castilla y León es una de las comunidades que mejor resistió la crisis y que también está entre las más próximas a recuperar los niveles de actividad prepandemia. Aunque la recuperación en estos momentos es menos intensa que en otros territorios que partían de una posición peor, ha reconocido el presidente, los datos apuntan al optimismo.
Motor de la economía
La economía, ha señalado, ha crecido en el segundo trimestre de este año un 17,8 %, el mayor incremento de la serie histórica y acabando así con cinco trimestres de caídas y recuperando el 44 % de todo lo perdido; a la vez que se ha recuperado el 97 % de la ocupación previa a la irrupción de la pandemia. Además, ha avanzado, la Junta prevé un crecimiento global del PIB (Producto Interior Bruto) de la Comunidad de en torno al 6 % cuando acabe este 2021.
“Sin duda, datos esperanzadores”, ha resaltado el presidente de la Junta, quien ha valorado que no hubieran sido posibles sin la implicación de todos los empresarios y emprendedores, “motor de toda la economía”. A la vez, ha señalado, el Gobierno de Castilla y León ha mantenido el apoyo a la labor empresarial con una política fiscal moderada, en la que se incluye la supresión del Impuesto de Sucesiones y Donaciones que ya se ha demostrado un acierto; la implantación de planes de choque con ayudas directas a los sectores más afectados, en torno a 465 millones de euros, incluyendo las que se gestionan del Estado, y también facilitando financiación a las empresas, para las que desde la Plataforma Financiera ya se han aprobado desde que se decretó el primer estado de alarma más de 750 millones de euros en ayudas a 5.800 empresas, lo que ha permitido mantener o crear más de 20.500 empleos. Además, ha recordado Fernández Mañueco, también se ha proporcionado más suelo industrial a bajo precio, lo que ha llevado a que el volumen de ventas en 2020 y lo que va de 2021 sea de los más elevados de la serie histórica.
A la vez, se ha apoyado la internacionalización de las empresas, ampliando la red exterior del ICI de 21 a 26 destinos. Y de cara a 2022, ha avanzado el jefe del Ejecutivo autonómico, se continuará con la aprobación de dos importantes instrumentos: un nuevo Plan de Internacionalización Empresarial, con planes específicos para sectores estratégicos, y la Estrategia de Emprendimiento, Innovación y Autónomos, en la que se dará especial importancia a la digitalización.
Un escenario, ha apuntado el presidente de la Junta, en el que tendrán un gran protagonismo los próximos Presupuestos de la Comunidad, que, según ha avanzado, alineados con la Agenda 2030, buscarán la recuperación sostenible y la reactivación de la economía y el empleo a medio y largo plazo. También garantizarán el gasto social, la calidad de los servicios públicos y la lucha contra la despoblación desde un compromiso con el mundo rural. Unas Cuentas, ha advertido Fernández Mañueco, que dada su importancia reclaman el mayor apoyo, a la vez que ha comprometido su apuesta por el diálogo para conseguirlo.
Cuestiones pendientes
Eso sí, ha advertido el presidente de la Junta, los próximos Presupuestos necesitan fuentes de recursos ciertas y seguras. Y, ha alertado, se ve con incertidumbre cuatro cuestiones que debe resolver el Gobierno de España. Por un lado, Fernández Mañueco ha exigido un reparto justo de los fondos europeos, de los que hasta ahora se han asignado a Castilla y León 1.595 millones de euros, cuando la Comunidad reclama el 6 % del total nacional, 5.000 millones. En este punto, ha animado a todas las empresas a presentar proyectos para acceder a esos fondos y hacerlo aprovechando los instrumentos que ofrece la Junta.
Por otro, el presidente de la Junta ha censurado el “desequilibrio” en la distribución del tope de déficit planteado por el Gobierno central, que del 5 % total solo otorga a las comunidades autónomas un 0,6 %, pese a que son las encargadas de prestar los servicios públicos esenciales. Además, Fernández Mañueco ha cuestionado la desaparición del Fondo Covid a pesar de que la pandemia hará que en el próximo año se sigan afrontando gastos sanitarios, educativos y sociales.
La limitación del endeudamiento y la supresión del Fondo Covid, ha advertido Fernández Mañueco, privan a Catilla y León de 1.000 millones de euros en el próximo Presupuesto. A esto se añade que sigue pendiente el cobro de los 182 millones del IVA, tal y como obliga una sentencia del Tribunal Supremo que da la razón a la Junta.
Proseguir por el camino de modernización
Los próximos Presupuestos, ha avanzado el presidente de la Junta, serán el camino de la modernización que ya se ha emprendido para Castilla y León, se impulsarán las grandes transformaciones que necesita esta tierra, aprovechando el enorme potencial en muchos ámbitos y sectores.
También, ha añadido, se pretenden desarrollar unos servicios sanitarios y asistenciales innovadores, que favorezcan un envejecimiento activo y saludable, a la vez que se avanza en la transición de la economía y sociedad hacia un modelo sostenible. Un gran camino al que Fernández Mañueco ha llamado a participar a todos para que “Castilla y León sea una tierra más atractiva, más rica, más fuerte, más acogedora, más próspera”.