La Junta de Castilla y León, a través de la Sociedad Pública de Infraestructuras y Medio Ambiente (Somacyl), ha culminado con éxito las obras de mejora del camino que une las localidades de Robles de Laciana y Sosas de Laciana, pertenecientes al municipio de Villablino, en el Área Natural de Conservación del Alto Sil (Reserva de la Biosfera de Laciana), en la provincia de León.
El propósito principal de esta intervención, que representó una inversión de 407.000 euros, es impulsar el turismo de naturaleza en la región, optimizando las infraestructuras de comunicación en esta zona de notable atractivo natural.
El camino original carecía de pavimentación y tenía una sección estrecha de aproximadamente 2-2,5 metros de ancho, con una longitud total de 972 metros. El punto de partida se ubicaba en el núcleo de Robles de Laciana, en la calle El Barreo, y el punto de llegada coincidía con la intersección del camino y la carretera LE-3312, vía de acceso a Sosas de Laciana.
El entorno presentaba pendientes pronunciadas, pastizales y huertos, además de carecer de un sistema de drenaje adecuado y de señalización, tanto vertical como horizontal. Tampoco contaba con elementos de balizamiento.
El proyecto de mejora ha transformado radicalmente este enclave mediante la ampliación, pavimentación y señalización del camino. La principal actuación consistió en ensanchar la sección hasta un mínimo de 3,7 metros de ancho, incluyendo la pavimentación con aglomerado asfáltico de 5 centímetros de espesor sobre una capa de zahorra artificial de 18 centímetros de espesor, así como la rehabilitación del sistema de drenaje.
Se mantuvo el trazado original del camino, realizando mejoras en la explanada en las zonas de ampliación y en aquellas con el firme deteriorado.
Adicionalmente, se ejecutó un sistema de drenaje longitudinal y transversal con 1.104 metros de cunetas hormigonadas y 9 pasos de agua; se construyeron tres muros de escollera en la margen izquierda para contener los taludes de tierra, con una altura máxima de 5,3 metros y una longitud total de 82 metros de muros; y se instaló una valla de malla electrosoldada para separar las parcelas de la margen izquierda del camino, con una longitud de 370 metros.
También se restauró el pilón del Camino de Quiñones, ubicado en el primer tramo del trazado, y se implementó la adecuada señalización vertical y horizontal, así como elementos de balizamiento y defensas apropiadas para este tipo de vía.
Estas mejoras no solo han incrementado la seguridad y comodidad de los viajeros, sino que también facilitan el acceso a la belleza natural de la región, promoviendo así el turismo sostenible y el desarrollo económico local.
Esta actuación forma parte del Programa de Infraestructuras Turísticas en las Áreas Naturales de Castilla y León (PITAN), una iniciativa que busca mejorar las experiencias de los visitantes en entornos naturales y rurales de la comunidad autónoma.
