El Instituto Leonés de Cultura (ILC) de la Diputación de León invertirá, a través del Programa R, 239.754 euros en rehabilitar la antigua Casa Consistorial de Valderas y convertirla en el Museo Casa del Bolillo. El proyecto, cuyo coste total asciende a 299.693 euros, sacará a la luz los elementos originales de este edificio de estilo herreriano que se encuentra sin uso desde el año 2009 y que presenta un "importante estado de deterioro".
Este inmueble nunca llegó a albergar la función para la que fue construido, sede consistorial, por lo que, en un principio, tanto la planta baja como la primera permanecieron diáfanas. La planta primera sería el espacio más relevante, con vigas de madera vistas separadas por bovedillas curvas de yeso (solución característica de edificios de calidad de la época).
Este techo se conserva en parte del forjado de la cubierta, aunque no en el de la planta primera, que es de realización posterior, por lo que se deduce que el edificio estuvo abandonado largo tiempo en el siglo XIX.
En el siglo XX, hasta el año 1972, fue reutilizado como oficina de telégrafos, unido a una vivienda situada en planta primera que se conserva en la actualidad. Esta reforma transformó completamente el edificio y de ella se conserva la distribución actual de la planta primera.
Después de una época, se utilizó de forma esporádica como juzgado de paz y, posteriormente, como oficina de correos hasta el año 2009. La reforma que permanece en la actualidad apenas tuvo en cuenta las características del edificio histórico y supuso la pérdida o enmascaramiento de gran parte de los elementos originales.
Desde entonces, ha permanecido sin uso, lo que ha motivado el deterioro acelerado, que obligó en el año 2017 a una intervención preventiva de urgencia de la Consejería de Cultura y Turismo.
El proyecto, subvencionado por la institución provincial, contempla la definición y valoración de las obras necesarias para rehabilitar este edificio para su uso como museo. Para ello, se propone eliminar todas las particiones interiores, dejando un espacio diáfano tanto en la planta baja como en la planta primera que permita un uso polivalente, adecuado a su nuevo destino.
El acceso al museo se realizará desde la puerta sur de la fachada de la plaza de Santa María y, al fondo, se ubicará la escalera de acceso a la planta superior, el ascensor y baño. El espacio de exposición consistirá en una sala sensiblemente cuadrada, con el cerramiento frontal realizado con listones de madera de cedro que impiden la visión directa de la escalera y las dependencias anejas.
La planta primera repite la misma configuración, permitiendo el acceso al balcón desde el espacio de exposiciones polivalente. En el techo de la sala de exposiciones, se abrirán dos huecos bajo los torreones que permitan su contemplación desde la planta primera. Además, se colocarán dos escaleras metálicas verticales que faciliten el acceso para mantenimiento de los torreones. Por otra parte, se dotará al edificio con nuevas instalaciones de electricidad, fontanería, climatización, telecomunicaciones, instalación contraincendios y ascensor adaptado. Todas estas actuaciones suponen una inversión total de 299.692,80 euros de los que el ILC aportará 239.754,24.
Este proyecto es uno de los 31 seleccionados en la segunda edición del Programa R de rehabilitación, recuperación y reactivación de bienes del patrimonio inmueble que cuenten con algún tipo de protección y sean propiedad de ayuntamientos, juntas vecinales o fundaciones. El programa nació con una partida inicial de 6 millones de euros y se ha visto reforzado con dos millones más en la segunda convocatoria.
