Con motivo de la moción por la autonomía en la diputación de León desde Alantre hacemos un llamamiento a la sociedad leonesa para que se manifieste y reclame sus derechos civiles como pueblo. Derechos que son negados por razones de Estado y los intereses, más propios del tardofranquismo que de una democracia actual, de los partidos con sucursal en León.
Los representantes de los partidos con sucursal en León deberían atenderla en su condición de leoneses, no de gerentes de dicha sucursal. Y es que con el PP rechazando abiertamente la moción en la diputación de León, se confirma el carácter de sucursal que estos partidos tienen en León, sin capacidad de autogestión alguna, obedeciendo las órdenes de otros centros de decisión ajenos al conjunto de la sociedad leonesa.
Es tal el carácter sucursalista de los principales partidos estatales en León que sus diputados, senadores y procuradores sólo obedecen las órdenes de sus sedes políticas, al margen o incluso por encima de la voluntad popular, mostrando fehacientemente que son la correa de transmisión de sus franquicias políticas y los asuntos contingentes que adopten en otras esferas de decisión y no la voluntad siquiera de sus propios votantes en territorio leonés.
El PP presentará un plan económico en contraposición a la moción por la autonomía, misma maniobra que hace tres años otros intentaron con la Mesa por León, en un vano intento frenar el clamor popular en la calle que protestaba por la ruina económica, la pérdida de población y la falta de empleos y futuro a la que nos vienen sometiendo todo este tiempo. El PP es el partido que más tiempo lleva gobernando en Castilla y en León desde la creación de la Junta de Castilla y León.
También aprovechamos esta coyuntura para señalar al/los gobierno/s de España su dejación de funciones en no velar por el justo equilibrio entre las diversas partes del territorio estatal y a garantizar la solidaridad interterritorial como señala el artículo 138 de la constitución. Una de las consecuencias de la ausencia de una autonomía leonesa es que exista menor renta per cápita en nuestra tierra o que la despoblación se agudice cada vez más.
Por ello, la cuestión leonesa ha de ser una cuestión de Estado.
La negación del derecho político más básico, como es la autonomía política de las leonesas y leoneses, es el ejemplo más palmario de la discriminación a la que nos someten y la negación de nuestra capacidad para decidir. Un derecho elemental del ordenamiento territorial actual que todos los pueblos del Estado poseen menos las leonesas y leoneses.
Llionés:
25/06/2024;(León_Llión) Nu que cinca la moción por l'autonomía na diputación de LLión dende Alantre facemos una chamada a la sociedá llionesa pa que se manifieste y reclame los sous dereitos civiles cumo puebru. Dereits que son negados por razones d'Estadu y los intereses, más propios del tardofranquismo que d'una democracia anguañu, de los partidos con sucursal en LLión.
Los representantes de los partidos con sucursal en LLión deberían atendela na sua condición de llioneses, nun de xerentes de dicha sucursal. Y yia que col PP refugando nidiamente la moción na diputación de LLión, afitase'l carácter de sucursal qu'estos partidos tienen en LLiónn, ensin capacidá d'autoxestión dalguna, obedeciendo las órdenes d'outros centros de decisión ayenos al conxuntu la sociedá llionesa.
Yia tal el xeitu foriatu de los principales partidos estatales en LLión que los sous diputados, senadores y procuradores sólo obedecen las órdenes de las suas sedes políticas, al marxen ou incluso penriba de la voluntá popular, mostrando dafeitu que son la correa de tresmisión de las suas franquicias políticas y los asuntos continxentes que adopten n'otras esferas de decisión y nun la voluntá siquiera de los sous propios votantes en territorio llionés.
El PP presentará un plan económicu en contraposición a la moción por l'autonomía, mesma maniobra qu'hai tres años outros intentaron cona Mesa por Llión, nun intento de frenar el glayíu popular na cai que protestaba pola ruina económica, la pérdida de población y la falta d'emplegos y futuru a la que nos vienen sometiendo todo esti tiempu. El PP yia'l partidu que más tiempu lleva gobernando en Castiella y en Llión dende la sua creyación de la Junta de Castilla y León.
Tamién aproveitamos esta coyuntura pa siñalar al/los gobierno/s d'España la sua dexación de funciones en nun facer na pol xustu equilibriu ente las diversas partes del territoriu estatal y a garantizar la solidaridá interterritorial cumo siñala l'artículu 138 de la constitución. Una de las consecuencias de la ausencia d'una autonomía llionesa yia qu'exista menor renta per cápita na nuesa tierra ou que la despoblación medre cada vez más.
Por eillo, la cuestión llionesa tien que ser una cuestión d'Estadu.
La negación del dereitu políticu más básicu, cumo yia l'autonomía política de las llionesas y llioneses, yia'l exemplu más palmariu de la discriminación a la que nos someten y la negación de la nuesa capacidá pa decidir. Un dereitu elemental del ordenamientu territorial actual que tódolos pueblos del Estadu poseen menos las llionesas y llioneses.