Este proyecto aprobado por la Junta de Castilla y León supondrá una inversión superior a los 12,77 millones de euros y afectará a una superficie de más de 3.903 hectáreas, propiedad de 2.438 agricultores.
El plan, cofinanciado con fondos europeos del Plan de Desarrollo Rural, busca optimizar la infraestructura rural, reduciendo los costes de explotación y mejorando la seguridad en los desplazamientos dentro de las áreas afectadas. Las actuaciones previstas se dividen en cuatro grupos principales: creación de una red de caminos, mejora del drenaje, restauración del entorno natural y eliminación de accidentes artificiales.
El proyecto contempla la construcción de más de 179,6 kilómetros de caminos, junto con la mejora de la capacidad de drenaje en 153,3 kilómetros de desagües. Además, se restaurarán zonas naturales, como canteras, y se replantarán áreas con vegetación autóctona. También se llevará a cabo la demolición de estructuras obsoletas y la renovación de tendidos eléctricos para facilitar la modernización.
Las obras se realizarán en los municipios leoneses de Villares de Órbigo, Villarejo de Órbigo, San Cristóbal de la Polantera, Santa María de la Isla, Soto de la Vega, Benavides, Santa Marina del Rey y Hospital de Órbigo