Durante su intervención, ha puesto en valor que la economía de Castilla y León avanza por encima de la media española gracias a la colaboración público-privada. Ha agradecido el esfuerzo de los empresarios y trabajadores para crear riqueza y puestos de trabajo, especialmente en el momento actual, marcado por la incertidumbre de la configuración del nuevo Gobierno de España y por las guerras en Ucrania y Oriente Medio.
Entre los principales datos económicos, ha destacado que Castilla y León se sitúa entre las comunidades que primero ha recuperado el PIB prepandemia; algo en lo que han influido, entre otras causas, el liderazgo en el incremento de exportaciones hacia los mercados exteriores –un 13,8 % en el acumulado de los ocho primeros meses del año–, con un importante superávit comercial; el crecimiento en la producción industrial –del 3,3 % en el mismo periodo–o avance del turismo –con un 10,15 % más de visitantes y un 12,5 % más de pernoctaciones en septiembre con respecto al año anterior–.
Además, ha hecho referencia a otros datos como el IPC, que lleva cuatro meses por debajo de la media nacional, y la deuda autonómica, que es 3,3 puntos inferior a la media de España. Todo ello está teniendo un reflejo importante en el empleo, donde la Comunidad tiene una tasa de paro 2,3 puntos por debajo de la media nacional en términos de la Encuesta de Población Activa (EPA) y acumula 29 meses consecutivos con descensos del número de desempleados en comparativa interanual conforme a los datos de paro registrado.
Economía competitiva y digitalizada
Fernández Mañueco ha señalado que esta recuperación, unida a una fiscalidad "moderada e inteligente" que apoya a las familias y al medio rural, permiten que la economía de Castilla y León sea "más competitiva, dinámica y diversificada", siendo líderes en automoción y energías renovables, y referentes en los sectores agroalimentario, biosanitario, farmacéutico, logístico, aeronáutico o de la ciberseguridad, entre otros.
Esto se debe, a su juicio, al esfuerzo y a la iniciativa de las familias, empresas y trabajadores y, también, a un Gobierno autonómico "serio, predecible y fiable", que apuesta por el Diálogo Social y que ha trasformado la Comunidad en los últimos años para hacerla más atractiva a aquellas empresas que quieran instalarse en ella. En esta línea, ha reiterado su voluntad de seguir impulsado bajadas fiscales, como la bonificación del 50 % en el Impuesto de Actos Jurídicos Documentados a autónomos y empresas en operaciones en suelo industrial y terciario.
Además, ésta es una economía más innovadora y digitalizada. El jefe del Ejecutivo autonómico ha manifestado su firme determinación para liderar una gran trasformación de Castilla y León a través de la modernización y de la digitalización, poniendo lo mejor de las tecnologías al servicio de las personas y apostando por la investigación y por la innovación para generar nuevas oportunidades y empleo
En este sentido, ha recordado que la Comunidad también es referente en innovación y se sitúa en la quinta posición en esfuerzo tecnológico a nivel nacional. De esta manera, el Gobierno autonómico seguirá apostando por la investigación y la innovación para la aplicación y mejora de los servicios públicos.
Atraer empresas
Todos estos indicadores, además de otros factores como la situación geográfica de Castilla y León, demuestran que ésta es una Comunidad donde resulta seguro invertir, ha asegurado el presidente. El Gobierno autonómico está impulsando medidas orientadas a la reindustrialización y a la atracción de empresas en todos los territorios de Castilla y León. Además, está invirtiendo más de 75 millones de euros en transformación digital; se ha aprobado una Estrategia de Emprendimiento e Innovación, con impacto en más de 40.000 empresas de la Comunidad, y se está apoyando a las empresas en su salida al exterior, a través del V Plan de Internacionalización 2022-2025.
Mención especial merecen los casi a 9 millones de metros cuadrados que el Gobierno autonómico tiene en desarrollo en la Comunidad, o los 450.000 que ha vendido solo en el primer trimestre del año, gracias a un precio asequible.
En este punto, el presidente ha indicado que su Gobierno trabaja en el desarrollo de un plan de impulso industrial con la energía como "imán de empresas" y “motor de empleo”, aprovechando el liderazgo de Castilla y León en la producción de fuentes renovables. El reto es que en un plazo de cinco años hasta el 80 % del suelo industrial de Castilla y León esté disponible con abastecimiento de energía renovable, de modo que la Junta ofrecerá a los inversores suelo a bajo precio, con energía a precio razonable en todas las provincias de la Comunidad, abaratando así uno de los costes productivos que en la actualidad resultan más elevados para las empresas.
Fernández Mañueco ha asegurado que seguirá apoyando el compromiso de las empresas con sus proyectos a través de instrumentos de financiación ágil y competitiva. En este sentido, se va a seguir fortaleciendo el Plan de Crecimiento Innovador para Pymes, con 260 millones de euros hasta finalizar la legislatura; y se van a incrementar los recursos actuales con dos nuevos instrumentos financieros dotados con 80 millones de euros en el periodo 2023-2027, mediante colaboración público-privada, para "impulsar la soncolidación y el crecimiento de empresas innovadoras y tecnológicas". Asimismo, ha expresado su voluntad de desarrollar y extender el ecosistema de apoyo al emprendimiento a toda la Comunidad.
Finalmente, el presidente ha reclamado al Gobierno español que apueste por Castilla y León y se leal con la Comunidad como lo es esta tierra, por lo que ha reivindicado un trato "igual" hacia las personas y los territorios de España, de modo que haya "igualdad de derechos y oportunidades".
Fernández Mañueco ha pedido al Ejecutivo central que afronte un nuevo modelo de financiación autonómica que cubra el coste de prestar unos servicios de calidad, informe de los límites de gasto y los datos para elaborar los Presupuestos Generales de la Comunidad y garantice la ejecución de las nuevas infraestructuras pendientes. Entre otras cuestiones, ha reivindicado un equilibrio para el Corredor Atlántico, que lo equipare a otros ejes estratégicos europeos.