Cruz Roja Española ha lanzado un ambicioso Plan de Respuesta a tres años para ayudar a las personas afectadas por la DANA, con un enfoque en la recuperación, resiliencia y bienestar de las comunidades. La primera fase, centrada en la respuesta inmediata, ha ofrecido más de 216,000 asistencias, alojado a cerca de 4,000 personas y distribuido miles de kits de higiene y mantas. El plan cuenta con un presupuesto inicial de 20 millones de euros y busca llegar a 60,000 personas a través de diversas fases que incluyen recuperación, apoyo psicosocial y fortalecimiento comunitario.
El Plan de Respuesta se desarrolla en tres fases claramente diferenciadas.
Fase 1: Respuesta inmediata
La primera fase, en la que Cruz Roja lleva trabajando desde el primer día, se centra en la asistencia urgente y en la atención de las necesidades inmediatas de las personas afectadas por las inundaciones. Entre las acciones más destacadas se incluyen:
- Entrega de alimentos, bebidas y bienes esenciales como ropa, productos de higiene y medicación para personas enfermas.
- Atención sanitaria de emergencia y colaboración con la red de transporte sanitario.
- Intervención psicosocial, incluyendo la dispensación de primeros auxilios psicológicos.
- Montaje de albergues provisionales para alojamiento temporal.
- Restablecimiento de redes de comunicaciones y apoyo en las tareas de limpieza y desescombro de espacios públicos y viviendas afectadas.
Hasta la fecha, Cruz Roja ha realizado más de 216,000 asistencias y ha proporcionado alojamiento a casi 4,000 personas en albergues habilitados. También se han distribuido más de 33,000 kits de higiene y entregado 3,200 mantas a las personas más necesitadas, todo ello con el apoyo de más de 4,800 voluntarios, que han trabajado de manera constante para atender las emergencias.
Fase 2: Recuperación
La segunda fase del plan se enfocará en la recuperación de la normalidad en las áreas afectadas, a través de acciones de apoyo continuo. Entre los objetivos principales de esta fase están:
- Entrega de ayudas y apoyo psicosocial sostenido.
- Establecimiento de puntos de información para orientar y derivar a los afectados a los recursos disponibles de Cruz Roja y otras entidades.
- Acompañamiento a trámites y ayudas, así como apoyo a las personas desempleadas y en la búsqueda de nuevas oportunidades laborales.
- Apoyo a la recuperación de negocios y actividades productivas, mediante ayudas específicas y complementarias.
Fase 3: Fortalecimiento y resiliencia
La última fase del plan se centrará en la preparación ante futuras emergencias, fortaleciendo la resiliencia de las comunidades afectadas. Las principales acciones en esta fase incluyen:
- Sensibilización sobre los riesgos y prevención de futuras crisis, mediante campañas de difusión y educación pública.
- Desarrollo de capacidades comunitarias para una respuesta más eficaz ante emergencias, incluyendo la formación en planes de emergencia familiares, simulacros y provisión de kits de primera respuesta.
- Refuerzo de las capacidades institucionales para mejorar los protocolos de intervención en situaciones de emergencia.
Colaboración y recursos
Desde el inicio de la emergencia, Cruz Roja trabaja en estrecha colaboración con administraciones públicas, fuerzas de seguridad y otros actores humanitarios, para cubrir las necesidades más urgentes de la población afectada. Entre las tareas coordinadas se incluyen la búsqueda y rescate de personas, el apoyo en la limpieza de viviendas y espacios públicos, y la provisión de necesidades básicas como alimentación, agua potable, y atención sanitaria.
En este contexto, Cruz Roja ha lanzado un llamamiento de ayuda que, hasta el momento, ha recaudado más de 43 millones de euros de particulares y 30 millones de euros de empresas y fundaciones. Estos fondos se destinarán íntegramente a la ejecución del Plan de Respuesta a tres años.
Prioridades de atención
Cruz Roja ha identificado a los grupos más vulnerables como prioridad en esta emergencia, tales como personas con viviendas o negocios afectados, personas mayores, familias con menores a cargo, personas con discapacidad, mujeres en situación de vulnerabilidad, personas migrantes y aquellas con problemas de salud. Además, se pondrá especial énfasis en la ayuda a las comunidades rurales gravemente afectadas por la DANA.
Con un presupuesto inicial de 20 millones de euros, Cruz Roja espera llegar a aproximadamente 60,000 personas a lo largo de las distintas fases del plan, proporcionando no solo asistencia inmediata, sino también apoyo a largo plazo para asegurar la reconstrucción y el bienestar de las personas y comunidades afectadas.