“¿Qué se hará con las palmeras del Palacete de Alcázar de Toledo?" es una de las preguntas más frecuentes dirigidas al doctor José Manuel Valle Folgueral en los últimos meses. Él ha adquirido dicho inmueble con la intención de convertirlo en una clínica especializada en patología de la columna vertebral. Ahora, con los permisos necesarios otorgados por la Comisión Territorial de Patrimonio, las tres palmeras pasarán a ser patrimonio de León y sus habitantes, ya que Valle Folgueral las ha donado al Ayuntamiento de la ciudad. Este ha decidido replantarlas en el paseo de la Condesa de Sagasta, en uno de los parterres cercanos al templete de la música. Allí, se indicará su origen y procedencia para que la ciudad no olvide su historia.
El alcalde de León, José Antonio Diez, recibió al doctor José Manuel Valle Folgueral este martes en el Ayuntamiento, donde le agradeció la donación. "Es un gesto muy bonito que los leoneses sabrán apreciar, al igual que la apuesta del doctor por atraer talento y generar empleo en la ciudad con este nuevo proyecto", afirmó el alcalde. Por su parte, Valle Folgueral mostró su satisfacción al hacer esta donación. "Estas palmeras forman parte de la memoria colectiva de la ciudad, la gente disfrutará de ellas y, además, conseguiremos evocar la memoria de los leoneses", afirmó el doctor.
El pasado mes de junio, la Comisión Territorial de Patrimonio emitió un dictamen favorable al proyecto de remodelación del Palacete de Alcázar de Toledo, un edificio mudéjar emblemático para León que ha resistido al paso del tiempo como ejemplo de las construcciones del ensanche a comienzos del siglo XX. El arquitecto encargado de la remodelación, Cecilio Vallejo, destacó la importancia de mantener la esencia del edificio mientras se adapta a las normativas actuales y se integra en la contemporaneidad, sin perder de vista la sostenibilidad.
Las tres palmeras donadas al Ayuntamiento de León por Valle Folgueral son de la especie Trachycarpus fortunei. Se estima que tienen entre 70 y 80 años de antigüedad, con una altura actual de entre 8 y 13,5 metros.
El Palacete de Alcázar de Toledo no quedará sin palmeras, ya que en el proyecto de transformación del edificio, catalogado como Bien de Interés Cultural (BIC), se contempla la sustitución de las actuales palmeras por otras de la misma especie y una altura entre 7,5 y 8,5 metros.
Actualmente, el edificio está en la fase final de los procedimientos administrativos previos al inicio de las obras de reforma, habiéndose realizado una importante labor de protección. Así, la ciudad podrá seguir enorgulleciéndose de este importante edificio y disfrutando de sus históricas palmeras, que formarán parte del paisaje urbano de León.